¿Sabías que las empresas no pueden recopilar datos personales sin consentimiento previo? Así es, las organizaciones deben solicitar el permiso para la relocción de datos una vez se crea una cuenta nueva o se visita por primera vez un sitio web. A los niños también les aplica esta política de protección al descargar juegos o aplicaciones pues son los padres quienes brindan su consentimiento al diligenciar su correo electrónico y permitir el acceso a los datos del dispositivo. Estos permisos pueden ser desactivados, pero es posible que las aplicaciones o juegos no funcionen como antes.
¿Qué información recopilan las empresas y cuál es su finalidad?
Las páginas web, los juegos y las aplicaciones recolectan información sobre el dispositivo utilizas, la dirección y búsquedas de Internet, ubicación, nombre, edad, etc; con el fin de ofrecerte productos de tu interés y vender pautas publicitarias a las demás empresas.
¿En los juegos y las aplicaciones se usa dinero de verdad?
Muchos juegos y aplicaciones venden servicios optativos, como niveles o personajes adicionales, nuevas características, indumentaria, moneda virtual, vidas adicionales o cajas de botín (loot boxes) las cuales puedes comprar con dinero de verdad por medio de tarjetas de crédito.
En muchos países se ha prohibido la venta de las loot boxes (cajas con objetos extras o sorpresas donde puedes sacar un objeto exclusivo o algo que ya tienes repetido mil veces) porque se parecen a un juego de azar y estos están reservados a los adultos, pero hay cajas de botín en los juegos para niños
¡Protege tu seguridad!
Proteger tus datos y tus dispositivos es un esfuerzo en equipo de toda la familia, usar contraseñas seguras y actualizar las aplicaciones y dispositivos es responsabilidad de todos.
¡Contraseñas 10!
Usa contraseñas del tamaño de una frase, formada por tres o cuatro palabras, un número y un carácter especial. Por ejemplo 2dinosaurios*lunagalleta es una contraseña muy difícil de adivinar, pero fácil de recordar, basta con pensar en dos dinosaurios que están en la luna comiéndose una galleta.
Trata de utilizar una contraseña distinta para cada una de tus cuentas y dispositivos, así si alguien adivina la clave de una cuenta concreta no podrá utilizarla para acceder a todas las demás.
Tu contraseña te pertenece: no debes compartirla con nadie, ni siquiera con tus mejores amigos. Las únicas personas que pueden conocer tus contraseñas son tus padres/tutores.